Un administrador de empresas (Matías Viel) y dos investigadores (Pedro Negri y
Agustín Sáez). De esa reunión nació, hace ya dos años, Beeflow, una startup argentina para aumentar el rendimiento de la producción de miel. Desde el comienzo, la idea nació por la necesidad de mejorar la cadena productiva de la polinización, agregando tecnología para aumentar los rindes.
"No todas las flores producen frutos de la calidad y tamaño deseados. Desarrollamos abejas fuertes e inteligentes para resolver esta ineficiencia", explican desde su sitio web oficial. Y Matías Viel amplía: “Nuestro país es uno de los primeros exportadores de miel del mundo. Descubrimos que había mucho conocimiento científico sobre la polinización y tecnología que podría servir para aumentar la producción".
Supieron así que las abejas muchas veces buscan plantaciones de flores poco atractivas y se distraen. "Encontramos un grupo pionero de la Universidad de Buenos Aires que estudia la memoria y el aprendizaje de las abejas", contó Viel. De esta manera se alimenta a las abejas con ciertos formulados para que estas polinicen en el cultivo indicado y aumente la transferencia de polen.
Entonces, la startup funciona como un intermediario que se encarga de alquilar colmenas a apicultores, para luego alimentar a las abejas con moléculas orgánicas que mejoran su sistema inmunológico y su rendimiento frente a bajas temperaturas.
"Ahora el apicultor empieza a recibir un rendimiento mayor y el productor tiene la producción más eficiente en su cultivo", cuenta el CEO de Beeflow, cuya implementación ya registró aumentos entre un 20% y un 90% del rendimiento.
Fuente: La Nación y http://www.beeflow.co/
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